jueves, 24 de noviembre de 2011

Y que les brinca la violencia

¿Se enteraron de ayer? En plena ciudad de Houston, en el estado norteamericano de Texas, un grupo de presuntos Zetas que iban a ser capturados en un operativo abrió fuego contra un tráiler y desató una ola de reacciones en la opinión pública y las autoridades de Estados Unidos que, por primera vez, vieron cruzar hasta su territorio la violencia del narcotráfico que en México hemos padecido en los últimos cinco años.

 

Las camionetas se detuvieron, bloquearon el camión, y los cuatro individuos salieron de ellas disparando. Mataron de inmediato al chofer del camión”, citó un portavoz de la DEA.

Luego, los agentes dispararon contra los cuatro hombres, cuando varios vehículos de la policía local llegaron a auxiliar a los agentes. Uno de los agentes resultó herido en la pierna.

El medio destaca que, aunque la DEA no lo ha confirmado, el diario Houston Chronicle dijo que el conductor del camión era un informante de la agencia, infiltrado en el cártel de Sinaloa.

En apariencia, la operación de la DEA perseguía otro objetivo, por lo que la aparición de Los Zetas los tomó por sorpresa. A estos hombres se les acusa de asesinato con premeditación, aunque no se sabe si su objetivo era la droga o privar de la vida al conductor del vehículo.

No vamos a tolerar ese tipo de violencia”, “No estamos acostumbrados a esto”, “Todo mundo está sorprendido con el descaro del ataque”, declararon a la prensa funcionarios de la DEA y autoridades de Texas que no daban crédito a lo ocurrido en plena vía pública, a la luz del día. Escenas como esa que se vivió en Houston, que le costó la vida a un civil que colaboraba con las autoridades y un oficial quedó herido, son cosa de todos los días en México, pero a los estadounidenses les pareció algo inaudito en su territorio.

Según narran las crónicas, en el condado de Harris, un camionero a bordo de un tráiler, que supuestamente entregaría droga, fue atacado repentinamente por tres camionetas en las que viajaban los presuntos Zetas, que abrieron fuego contra el camión que supuestamente llevaba la droga. De inmediato, agentes de seguridad repelieron la agresión y la balacera sorprendió a los texanos, que ya habían vivido el fenómeno de las pandillas del narco en la frontera, y que están acostumbrados a que en sus ciudades vivan y se muevan narcos mexicanos que en su territorio están seguros, pero nunca habían visto una balacera de esa magnitud en las calles nada menos que de Houston.

Así que la indignación, ya se pueden imaginar, es mayúscula en Texas y en Estados Unidos. Ya se pueden esperar toda clase de reacciones, desde la Casa Blanca hasta la DEA, pasando por el Departamento de Estado o la oficina de Janet Napolitano.

Y es que la violencia del narco está bien en México, donde puede haber todos los días balaceras en las calles, asesinatos violentos, ejecuciones de policías y funcionarios, pero en territorio de EU, ¡jamás! Ahí sólo quieren la droga que en cargamentos de cocaína, mariguana o metanfetaminas cruza todos los días la frontera, ya sea por tierra, aire o mar, y llega puntual a territorio americano y de ahí se distribuye, sin muertos ni violencia, a las principales ciudades donde viven los millones de junkies y drogadictos gringos.

La droga para acá y los muertos y la violencia para México parece ser la consigna de Washington que, lejos de lamentar la situación de horror y violencia que hemos vivido los mexicanos en los últimos años, particularmente en el sexenio de Calderón, lo celebran y aplauden como una “guerra justa y necesaria” en la que nosotros ponemos los muertos y ellos se fuman la droga y mantienen su economía con las millonarias ganancias económicas que genera el narcotráfico.

Pero ayer les tocó sentir lo que son los balazos a plena luz del día, en cualquier calle o avenida de una ciudad. Seguro no les gustará nada y lanzarán operativos y acciones para rastrear y eliminar a los narcos que se les han infiltrado en sus ciudades y que, en muchos casos ante su negligencia o desinterés, viven tranquilamente en territorio de EU o, como en el caso de El Chapo Guzmán, cruzan cuando quieren sin ser molestados y hasta tienen hijos nacidos allá donde encuentran un refugio tranquilo.

Nadie quiere que la violencia afecte a otros, pero en este caso, tal vez lo ocurrido en Houston, con esta balacera en las calles de la importante ciudad texana, sirva para que las autoridades de EU dejen de ser tan insensibles sobre la violencia brutal que se vive en amplias regiones de México y en la que ellos han sido parte clave al alentar y mantener una guerra que, lejos de debilitar al crimen, sólo ha afectado a los ciudadanos que han visto perdida su seguridad y tranquilidad, cuando no su propia vida.

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Bendita, bendita tu luz

Hace un año a esta precisa hora, conocí a una sensacional persona que cambio mi vida, le dio un nuevo enfoque y me dio el impulso para seguir adelante con mis sueños que ya estaban alicaídos en ese entonces.

Pongo el video porque me parece idóneo. Las circunstancias nos pusieron de frente, el destino, el fatum, la alineación cósmica o como quiera llamarse, nos unió en ese momento.

Bendito el lugar y el motivo de estar ahí. Bendita la coincidencia.

Bendito el reloj que nos puso puntual ahí. Bendita sea tu presencia.

Unos sensacionales días que me permitieron conocerla a fondo como persona, genial, interesante, agradable, como alguien que le preocupa el entorno, que tiene sueños e ilusiones (infantiles para muchos). Ver como somos tan símiles y ver como aun con la adversidad no se había dado por vencida, me incitaron, me convencieron que debía continuar creando, ayudando al prójimo y haciendo realidad mis sueños.

Hoy, a pesar de la distancia y la falta de encuentro, te doy las gracias. Aunque no lo creas hiciste mucho por mi, mas de lo que te imaginas, se que en un futuro nada lejano nuestros proyectos volverán a unirse, estaremos juntos trabajando hombro con hombro.

Benditos ojos que me esquivaban, simulaban, decían que me ignoraban. Y de repente sostienes la mirada.

Quizás no recuerdes este momento, pero para mi fue significativo. Tanto que como puedes ver recuerdo el día y la hora que nos unieron. Espero le des la misma importancia o quizás ya se la estés dando (detalle que me fascinaría).

Seguimos en contact. Hasta pronto.

lunes, 14 de noviembre de 2011

De robos y fraudes. Y nadie, hace nada

paquiNo veía un robo tan descarado, desde que Carlos Salinas llegó a la Presidencia en 1988 con todo y su “caída del sistema”; no había visto un fraude cometido en las narices de tanta gente, desde que Felipe Calderón llegó a Los Pinos “haiga sido como haiga sido” en el 2006. Y el sábado, esa sensación de sentirse robado, estafado, defraudado volvió a mí, como seguramente a muchos de ustedes, cuando los jueces de la Organización Mundial de Boxeo le dieron el triunfo a Manny Pacquiao frente al mexicano Juan Manuel Márquez.

Nadie de mis conocidos y un servidor podíamos creerlo. Junto con un grupo de amigos que invitamos a casa para ver la pelea, nos jalábamos los pelos, gritábamos impotentes y se la refrescábamos a los tres jueces que burda e injustamente decidieron que Márquez había perdido, cuando todos vimos claramente una mucho mejor pelea del mexicano que del campeón filipino.

Por supuesto que, como en todos los robos, hubo intereses de por medio. Las apuestas en los casinos estaban 70 a 1 a favor del campeón Pacquiao, ¿se imaginan si hubieran reconocido el triunfo del mexicano cuánto dinero hubieran perdido los dueños de los casinos, que no son otros en origen que los mafiosos de los Estados Unidos?

No sólo eso, la que está llamada a publicitarse como la “pelea del siglo” y un negocio multimillonario para los promotores y directivos del boxeo, el combate entre Pacquiao y Floyd Maywather, no podía llevarse a cabo si los jueces hubieran sido honestos con lo que ocurrió y le hubieran dado la victoria al mexicano Márquez. ¿Saben cuántos contratos de publicidad, de televisión y de cuanta cosa se imaginen debe haber ya vendidos para esa pelea? Lo negativo de todo esto, es que la credibilidad del boxeo como deporte queda en entredicho. Si ya había sospechas y ha habido casos documentados de peleas arregladas, de boxeadores a quienes les ponen rivales a modo para hacerlos ascender, si desde hace tiempo se sabe que las apuestas y los casinos se apropiaron de lo que empezó siendo un deporte limpio y con reglas, hoy se confirma que el boxeo, más que deporte, ha sido prostituido y convertido en un espectáculo ya no con deportistas, sino con “estrellas” como Pacquiao que harán todo lo que tengan que hacer, incluso ser deshonestos, para lograr que funcione la máquina de hacer dinero en la que han convertido al boxeo.

Porque el gran Pacquiao, admirado por muchos jóvenes y niños en el mundo, no pudo ocultar una mueca de incomodidad cuando le levantaron el brazo y le colocaron el cinturón de campeón mundial que logró retener “haiga sido como haiga sido” el sábado en Las Vegas. Él, que ha sido considerado el mejor peleador del mundo “libra por libra”, sale también raspado de este penoso episodio y demuestra que, al final, más que un boxeador fenómeno como muchos lo veían, es una pieza más en la millonaria industria de dinero que es el box profesional.

Dicen los expertos que tal vez Juan Manuel Márquez equivocó la estrategia y que en lugar de apostarle a una decisión y a dar una pelea impecable en lo técnico, debió haber buscado desde el principio un knock out que era la única forma en la que le sería reconocido un triunfo sobre el campeón Paquiao. “No había manera que le ganara por decisión, sobre todo en una decisión apretada, los jueces siempre tenderán a favorecer al campeón”, dijo un experto de la televisión estadounidense, quien sin embargo decía que él no vio ganar a Manny.

En fin, nos quedaremos con la frustración y el coraje de haber sido asaltados, robados vilmente. Y lo peor es que lo seguiremos sintiendo cada mes, ya no por las peleas de box en Las Vegas, sino por los “gasolinazos” que cada mes nos seguirá recetando el gobierno de Calderón, con sus “aumentos graduales” a la gasolina. Ese robo, también descarado e impune, sí que duele y molesta, lo otro al final es sólo box.

viernes, 11 de noviembre de 2011

Presupuesto de salud, una evaluación de la política

La aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) es una tarea clave de la Cámara de Diputados y un mecanismo para acotar el Poder Ejecutivo. La distribución de los recursos fiscales entre distintas actividades debe expresar las prioridades de la nación. Por ello es muy importante que la discusión sobre el presupuesto se haga de cara a los ciudadanos y de manera que ellos puedan entender las implicaciones para su vida diaria.

La salud puede parecer uno de los ámbitos sociales más favorecido durante este gobierno, pero esto depende de cómo se presentan los datos del presupuesto. Sin embargo, si se analizan con detenimiento, el panorama es disímil.

En primer lugar es necesario subrayar que el gasto público federal en salud es la suma de los recursos dedicados a la Secretaría de Salud (SSA), los Servicios Estatales de Salud y los de las instituciones de seguridad social (Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado y las secretarías de Defensa y Marina). Este gasto total es de 409.4 mil millones de pesos para 2012 y representa 2.8 por ciento del  producto interno bruto (PIB). Al incluir el gasto de las entidades federativas es del orden de 3.0 a 3.1 del PIB, muy lejano del 4.9 por ciento reportado a las organizaciones Mundial y Panamericana de la Salud (OMS/OPS). Este porcentaje se compara además desfavorablemente con países como Brasil, Argentina, Chile, Uruguay e incluso Bolivia.

La parte del presupuesto total de salud que ha crecido más rápidamente es de la SSA, mientras que el del IMSS ha sido particularmente perjudicado. El incremento del presupuesto de la SSA corresponde principalmente a la parte manejada por la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (CNPSS), que en el PEF de 2012 corresponde al 70 por ciento del total. Esto se explica por los recursos dedicados al Seguro Popular (SP) y el Seguro Médico para una Nueva Generación, que juntos representan el 63 por ciento del presupuesto de la SSA. La importancia de ello es que debería permitir a los beneficiarios acceder a los servicios de salud sin costo al removerse la barrera económica.

Los datos desmienten que el aumento presupuestal efectivamente garantice el acceso. La propia CNPSS calcula el costo de los servicios incluidos en el Catálogo Universal de Servicios de Salud (Causes) en mil 999.5 pesos por persona en 2011. El número de beneficiarios reportado por la CNPSS en junio de 2011 era de 48.5 millones y alcanzando la cobertura universal del SP serían 51.3 millones. La simple multiplicación de personas por el costo del Causes demuestra que el presupuesto asignado tiene un déficit de entre 44 y 49.5 mil millones de pesos o del 45 al 50 por ciento en 2012; situación que concuerda con el señalamiento de la Auditoría Superior de la Federación en 2005.

Otro faceta del presupuesto destinado al SP es su uso por parte de las entidades federativas. El PEF exige a los estados rendir cuentas al CNPSS sobre su ejercicio, aunque los rubros por reportar disminuyeron entre 2010 y 2011. La primera obligación es informar sobre el destino de las transferencias que se exhibe en la página web de la CNPSS. En agosto de 2011 faltaba por informar sobre 18 mil millones de pesos o el 50 por ciento del presupuesto transferido en 2010. Ningún estado había informado al 100 por ciento y cinco estados no habían informado.

Una queja muy recurrente de los beneficiarios del SP es la falta de medicamentos en las unidades médicas. El PEF especifica que las entidades federativas pueden utilizar hasta el 30 por ciento de los recursos transferidos en su compra. Sin embargo, sólo se gastó el 6.5 por ciento de las transferencias en medicamentos en 2010, según la página de la CNPSS y en la absoluta mayoría de los estados no llegó al 10 por ciento. En este contexto, es de subrayar que una de la supuestas ventajas de este seguro es que permitiría el acceso a los medicamentos que son frecuentemente más caros que la consulta, e incluso que una intervención quirúrgica sencilla.

Anteriormente señalé que casi todos los funcionarios de primer nivel de la SSA son economistas o administradores, lo que no ha impedido el caos en su administración y las malas prácticas económicas. Los diputados tienen la responsabilidad de proveer a todas las instituciones de salud el presupuesto que requieren para garantizar una atención digna y técnicamente correcta a los mexicanos, pero tienen además los instrumentos para supervisar y hacer cumplir el ejercicio presupuestal. ¡Qué ejerzan sus facultades!